LA NOTICIA DIGITAL, SANTO DOMINGO.- La pandemia por la COVID-19, se ha convertido en la prioridad de los sistemas de salud a nivel mundial, lo que ha disminuido el foco a tareas pendientes en lo relacionado a otras condiciones o enfermedades, como es el caso de los pacientes que presentan cuadros de dolor crónico.
Un síntoma que, según informaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) demanda que alrededor de 40 millones de personas necesiten cuidados paliativos en el planeta.
El dato también revela que, el 78% de estos pacientes provienen de países de ingresos bajos o medianos. Una realidad que se evidencia en los hogares dominicanos, donde al menos una persona padece o ha padecido de dolor crónico.
Ante esto, y en conmemoración del Día Internacional de Cuidados Paliativos, que este año lleva el slogan “Mi Cuidado, mi bienestar”, es importante traer sobre la mesa las barreras que presenta el país para lograr garantizar a los pacientes con dolor de moderado a severo un correcto tratamiento de su condición.
En ese sentido, Juan Miguel Madera, vicepresidente ejecutivo de la Asociación de Representantes, Agentes y Productores Farmacéuticos, Inc. (ARAPF) considera que uno de los principales puntos de atención debe ser el acceso a los medicamentos propios de los cuidados paliativos.
Esto a raíz de que dichos pacientes presentan dificultades para movilizarse debido al dolor severo que poseen y que, sumado a las limitaciones por la pandemia, hace cada día más tormentoso vivir bajo dicha condición.
“El acceso a los medicamentos es clave para garantizar el bienestar de los dominicanos. Por tal motivo, es necesario que las autoridades hagan una revisión a las reglamentaciones que regulan la comercialización de los fármacos destinados para pacientes con dolor crónico y que no pueden desplazarse de una provincia a otra para comprarlos”.
Además, agregó que: “La misma OMS, ha reconocido que existen medidas muy restrictivas respecto a este tipo de medicamentos, lo que limita la adquisición de estos productos farmacéuticos a través de los medios adecuados”, concluyó Madera.
Los pacientes de cuidados paliativos son aquellos que presentan dolor crónico, cuadros clínicos delicados y que se manifiestan a causa de enfermedades como el cáncer, la diabetes, la hipertensión, las deficiencias renales, la artritis reumatoide, entre otros. Además, es común en pacientes post quirúrgicos que se enfrentan a dolor moderado o severo.
Otras necesidades
En adición al desafío que representa el acceso a los medicamentos para los pacientes que se encuentran en cuidados paliativos, en tiempos de sufrimientos y muertes, se añade que en la República Dominicana no están garantizados los servicios de los cuidados paliativos.
Una debilidad que se ha evidenciado durante la pandemia en el ingreso en domicilio de los pacientes con enfermedades crónicos degenerativas y pacientes oncológicos. Asimismo, dentro de estas barreras se encuentra la no cobertura de las visitas en domicilio de las personas en estas condiciones.
Dicho esto, la doctora Bethania Martínez, presidenta de la Asociación Dominicana para el Estudio y Tratamiento del Dolor y Cuidados Paliativos expresó la necesidad que tiene el país de establecer una hoja de ruta para la correcta atención de los pacientes en cuidados paliativos.
“En este contexto por la COVID-19, se hace más importante la creación de protocolos que sirvan de guía para que, se pueda responder de manera adecuada a este nuevo reto y brindar una mejor atención a los pacientes de cuidados paliativos, sobre todo, a aquellos a los que se les brinda un servicio ambulatorio, el cual es la manera más común de consulta debido a la pandemia”, indicó la presidenta de la entidad.
Ambas asociaciones manifestaron su postura de colaborar con las autoridades para juntos encontrar soluciones en beneficio de la salud de los dominicanos.
Sobre ARAPF
La Asociación de Representantes, Agentes y Productores Farmacéuticos, Inc. (ARAPF) agrupa y representa a las empresas del sector, así como promueve la constante actualización y el mejoramiento de la actividad farmacéutica en la República Dominicana, colaborando con el desarrollo del país, especialmente en el ramo de la salud.
Desde hace más de cuatro décadas, aúna esfuerzos para luchar contra el comercio ilícito de medicamentos y trabaja junto a las autoridades dominicanas y sus asociados con el objetivo de para garantizar el bienestar de los dominicanos mediante un correcto abastecimiento de medicamentos. ARAPF promueve la libertad de empresa, la libre competencia, el respeto al derecho de patente y la práctica de la más elevada moralidad.